Es normal ver cada vez más hogares que cuentan con la compañía de uno o más conejos. Estos se han convertido en la mascota ideal, sobre todo, por ser tan adorables y amigables con las personas. Aunque no lo parezca, estos animales pueden padecer parásitos internos y externos que, en algunos casos, se transmiten a los humanos; lo cual nos deja ver la importancia de que conozcamos los productos y sus métodos de desparasitación en conejos.
De esa forma, podremos establecer un calendario de desparasitaciones que sirva de modo preventivo. Desparasitar, vacunar, esterilizar y alimentar correctamente, además de proporcionar un entorno adecuado, son los pilares de una buena salud y un excelente estilo de vida.
¿Es necesario desparasitar a tu conejo?
Sí, es necesario desparasitarlos. Los conejos pueden presentar parásitos tanto externos como internos. Por ello es básico, para ahorrarnos problemas que incluso pueden resultar graves, que lo primero que hagamos una vez adoptemos a nuestro compañero sea llevarlo a nuestro veterinario de confianza para que lo revise, a no ser que nos lo hayan entregado con información seria sobre su estado de salud.
Revisando su pelaje y su piel, podremos observar la presencia o ausencia de parásitos como pulgas, piojos o garrapatas, así como heridas o alopecias que puedan sugerir la existencia de ácaros causantes de patologías como la sarna. Además, con una muestra de heces tomada mediante la introducción de un termómetro en el recto, es posible buscar en el microscopio diferentes gusanos intestinales o coccidios. Así, como vemos, podemos distinguir entre la desparasitación interna y la externa.
Desparasitación interna en conejos
Si hablamos de desparasitación interna en conejos, nos encontramos, por tanto, con pastillas y jarabes, puesto que los productos con este fin deben ser ingeridos para hacer efecto. Destaca el fenbendazol. Ambas presentaciones suelen emplearse para combatir los parásitos internos.
Se recomienda que los conejos sean desparasitados un par de veces al año con un producto de amplio espectro, salvo que se encuentre algún otro parásito que requiera un tratamiento específico. Para escoger la presentación del antiparasitario, además de su principio activo y, por tanto, las especies contra las que actúa, debemos tener en cuenta, también, la facilidad de administrárselo a nuestro conejo.
Para administrarlo, se deben tener en cuenta ciertos consejos, por ejemplo, el pedir ayuda a uno o varias personas para manejar al conejo, sobre todo si no cuentas con la experiencia indicada. Ten en cuenta que el estrés puede ser causa de grandes daños e incluso acabar con la vida de nuestra mascota, así que procura brindarle un ambiente calmado.
Envuelve el conejo en una toalla, dejando solamente libre la cabeza. Con esta simple acción, impedirás que se mueva y utilice sus patas. No utilices la fuerza bajo ninguna circunstancia. Una vez administrado la medicación, lo mejor que puedes hacer es dejarlo que se refugie en un lugar tranquilo o darle un premio.
Si tenemos que darle pastillas, puede ser buena idea diluirlas en un poco de agua y administrarlas con una jeringuilla. Otra opción sería ponerlas en su comida favorita. Algunos conejos son capaces de comerlas así directamente, con lo que no les resulta nada traumático.
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