Curiosidades sobre los bigotes de los gatos

Sin dudas, una de las características que hacen a nuestros mininos sumamente adorables son sus bigotes, pero, ¿qué tanto sabes sobre ellos? Te proponemos descubrir algunas curiosidades sobre los bigotes de los gatos, así como su importancia.

Anatomía de los bigotes gatunos

Técnicamente, los bigotes de los gatos son “vibrisas”, pelos especializados en la función mecanoreceptora. Es decir, que funcionan como receptores táctiles, al igual que los pelos igualmente largos que tienen encima de los ojos, barbilla y patas delanteras.

El secreto de su sensibilidad se encuentra en su ubicación, ya que no están insertados en la dermis, sino en la hipodermis. Esta zona es mucho más profunda, en donde las vibrisas se encuentran rodeadas de nervios y vasos sanguíneos, encargados de transmitir información directamente al cerebro.

5 curiosidades sobre los bigotes de los gatos

La mayoría de mininos tiene entre 16 y 24 vibrisas, pero para saber para qué sirven en específico, te proponemos conocer las siguientes curiosidades sobre las mismas:

1. Su longitud es igual a la anchura del gato

Los bigotes faciales de nuestros gatos alcanzan el mismo largo que su contextura, de ahí que funcionen como una cinta métrica con la cual pueden calcular cualquier espacio para saber de antemano si pueden pasar o no.

2. Permiten detectar detalles sobre su presa en la oscuridad

Al funcionar como herramientas sensoriales, los bigotes son también radares que les permiten conocer la distancia y situación de una presa. Sobre todo para detectar cuál es la parte vital a la que deben atacar para garantizar el éxito de su caza.

3. Su posición brinda datos sobre su estado anímico

Cuando los bigotes de un gato están de lado, el gato definitivamente se encuentra tranquilo. Ahora bien, si se colocan hacia atrás, es mejor tomar distancia porque se tratará de una posición de ataque o defensa.

Asimismo, notaremos que al acercarle algún alimento especialmente oloroso que les llame la atención, las vibrisas se aproximarán primeramente al objeto para detectar mayor detalle sobre su palatabilidad. Esto, por supuesto, no les ayuda a diferenciar alimentos tóxicos o envenenados, no se trata de un superpoder.

4. Por su sensibilidad, no son una parte “acariciable”

Aunque esto depende de cada gato, a la mayoría le molesta que les acaricien los bigotes, porque son zonas muy sensibles. Sin embargo, algunos se muestran muy receptivos ante las caricias suaves en que se alisan los bigotes hacia atrás.

5. No deben recortarse bajo ningún concepto

Aunque sean más largos de lo que te gustaría, nunca debes cortarle sus bigotes, pues de hacerlo, tendrá las siguientes consecuencias para su desempeño y bienestar:

• Pérdida de la orientación, el sentido de la profundidad y el equilibrio.
• Propensión a tropiezos o atascos en lugares estrechos.

Y puede que te preguntes, ¿por qué alguien recortaría los bigotes a su gato? Pues además de por creer que más cortos le serán más cómodos al felino, existen falsas creencias que afirman que un gato con los bigotes recortados dejará de salir de casa, o regresarán de seguro cuando lo hacen.

Claro, los bigotes de los gatos vuelven a crecer, pero por la salud y el bienestar de tu minino, es mejor que no repitas esta “amputación”.

¿Conocías ya todas estas curiosidades sobre los bigotes de los gatos? Coméntanos tu experiencia con los bigotes de tu mascota.