En muchas ocasiones los conejos son resistentes a las enfermedades que los afectan, sobre todo si viven en casas o apartamentos, aunque eso no quiere decir que son inmunes o los virus. Esto puede ocurrir, sobre todo, si los cuidados que les brindamos no son los más óptimas.
Como sabrás, los conejos son animales bastante silenciosos y discretos, por lo cual detectar cualquier padecimiento suele ser una tarea difícil. Y es que por naturaleza, los conejos suelen ocultar sus padecimientos, esto lo hacen para no demostrar debilidad ante posibles depredadores.
La sarna, de la cual hablaremos en este texto, es una infección que se puede convertir en epidemia si no se detecta a tiempo, por lo que es muy importante que te documentes sobre ella y hagas todo lo posible para evitarla en tu mascota.
Lo primero que debemos aclarar, es que el clima frío no es amigo de la sarna, por lo tanto si te encuentras en lugares con este tipo de clima, no es común que los conejos sufran dicho mal. Sin embargo, es normal que surja en granjas o en animales silvestres. Se origina, principalmente, en madrigueras y en condiciones de higiene precarias.
Por otra parte, en los climas más templados y húmedos, es una de las enfermedades más comunes, la cual muchas veces se puede pasar a otros animales que se encuentren cerca, por ejemplo, perros o gatos.
La sarna puede afectar a conejos de cualquier edad, y en muchas ocasiones el animal es muy hábil escondiendo los síntomas de su malestar, por lo que es necesario estar atento a los cambios de comportamiento, pues la sarna puede llevar a un conejo a la muerte en tan solo unas pocas semanas.
Lo más normal es que el contagio ocurra entre un conejo infectado y uno sano. Esta enfermedad se pasa mediante los ácaros, y el contagio puede comenzar una epidemia que si no se controla a tiempo es capaz de acabar con una población de estos animales.
Los ácaros se alojan en la piel de donde saltan de un conejo a otro. Las hembras de esta especie abren surcos en la dermis, donde ponen sus huevos y crecen las larvas. Un ácaro puede vivir, como máximo, tres semanas.
El contacto directo con un conejo infectado no es la única forma de contagio, esta también puede darse con los parásitos que son transportados por el viento, por >un entorno infectado de ácaros(los distintos tipos de este parásito difícilmente son visibles para el ojo humano), e incluso por el contacto con un humano que ha estado en una colonia o granja de conejos en donde hay sarna.
El tratamiento suele tener como fármaco principal la ivermectina, la cual se administra en inyecciones subcutáneas de acuerdo al peso del animal. La mejora comienza a notarse después de una semana de haber iniciado el tratamiento de la sarna. Tu veterinario te recomendará el medicamento más idóneo según el tipo de sarna y la extensión de la enfermedad.
Evita a toda costa tratamientos “tradicionales” o recomendados de boca en boca. Un ejemplo puede ser rociar al conejo con kerosene para matar a los ácaros, pero en este caso intoxicarás al animal, poniendo su vida en peligro. En cuanto a posibles remedios caseros, lo mejor es confiar en las recomendaciones del especialista.
Esta entrada ha sido publicada el 02/11/2020 11:00
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